The Big Bang Theory 7x06-“The Romance Resonance”: Review
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Por Alex Crespo.
¿Sheldon llevando a
cabo uno de los descubrimientos más importantes de su carrera científica? Todo
el mundo a cubierto. Mientras, Wollowitz sabe cómo llegar al corazoncito de
Bernadette. Todo lo contrario que Penny…
Sheldon lleva desde
el principio de la serie pavoneándose de ser una de las mentes más brillantes
de la Tierra, pero lo cierto es que, en lo que se refiere a resultados
concretos en sus investigaciones, poco o nada habíamos visto hasta ahora.
Incluso un par de sonados fracasos. Claro que en mi ignorancia, no sé si un
campo como la Física Teórica es dado a la obtención de esos resultados
concretos. Sea como fuere, en estas va y Sheldon y obtiene un gran logro
científico. Pues lo que nos faltaba ya, si el ego del doctor Cooper no tenía
límites, ahora tiene campo abonado para pavonearse inmisericorde antes sus
colegas. O no. Porque una cosa hay que reconocerle a Sheldon.
Lo mismo que
puede ser irritantemente pagado de sí mismo, a su vez es tremendamente auto
exigente, y no puede admitir recibir reconocimiento por algo que en realidad no
ha hecho o ha sido por casualidad, como es el caso. Y hay que tener en cuenta
que gran parte de los grandes descubrimientos de la Humanidad han tenido un
componente importante de suerte. Pero nada de eso vale para el gran Sheldon
Cooper. No sé qué es peor: si cuando está de subidón o cuando está quejica y
pesumbroso, lamentándose incluso de obtener subvenciones y aumentos de sueldo.
La madre que lo parió. Menos mal que desde que Amy apareció en su vida, tiene
alguien que sabe “leerle” adecuadamente y decirle lo que necesita en el momento
que necesita. Porque confundir esas cantidades, anda que… Estos americanos y el
Sistema Métrico Internacional, qué mal lo llevan, leñes. La química entre los
dos es tremenda, y juntos deparan varios de los mejores gags del capítulo, como
todo lo referente a esa famosa lista de personas que entrarían en una
hipotética casa árbol de Sheldon, en la que Amy no está incluida al principio
¡Por favor, Sheldon, en qué estás pensando! Y no me neguéis que al principio os
quedasteis igual de alucinados como yo con ese casi-beso entre Sheldon y Amy,
aunque todo resultara ser una ensoñación. No te preocupes, Amy, estoy
convencido de que más pronto que tarde llegará. Punto también para las escenas
de Sheldon “concentrado”. Ese “¿Cuándo
hemos llegado al Cheesecake Factory?” me provocado lagrimones de la risa.
De verdad. Jim Parsons sigue demostrando que cuando le ponen buenas líneas sigue
siendo el alma de la serie, y que tiene una capacidad cómica y payasa al
alcance de muy pocos.
Pero si hay alguien
que se lleva la palma en este capítulo, ese es Howard. Y no sólo en este. Wollowitz
es indudablemente uno de los personajes que más y mejor ha evolucionado durante
la serie, y Simon Helberg me parece un grandísimo actor que sabe imprimirle al
personaje un carácter especial. Hay gente que echa de menos al Howard salidorro
de las primeras temporadas, pero la relación con Bernadette y el buen equipo
que forman a mi parecer suple perfectamente ese aspecto. La canción que le
dedica por su aniversario estoy seguro de que va a quedar como uno de los
grandes momentos de la serie. Yo estaba todo el rato con una sonrisa de oreja a
oreja, con todos cantando a coro “y
seguro que aun viviría con su madre”. Antes de proseguir, una curiosidad
sobre la canción. Según confirma el propio Simon Helberg en su twitter
(información sacada de The Big Bang Theory Wiki, página imprescindible para
todos los seguidores de la serie y de gran ayuda a la hora de hacer estas
reviews), la canción ha sido compuesta por el dúo Garfunkel & Oates, de las
que os he hablado aquí en alguna ocasión. Para los que no estéis al día, las
componentes son Riki Lindhome, quien salió en la serie allá por la segunda
temporada, y Kate Micucci, la mismísima Lucy que salió con Raj al final de la
temporada pasada. Y atendiendo a los avances de los próximos capítulos, parece
que la tendremos de vuelta por la serie en breve. Me alegro un montón. Y espero
que Bernie aprenda a tener más cuidado con los componentes que maneja, que
algún día de estos vamos a tener una desgracia…
Para finalizar, el
tema del romanticismo o falta del mismo en la relación entre Penny y Leonard lo
han tratado tantas veces que ya no provoca ninguna emoción. Ni siquiera el
recurso de la caja con recuerdos de momentos especiales es novedoso, ya lo
vimos hace muchos años en Friends. Cierto que una vez asentada la relación
entre ambos, no hay mucho material dramático con el que jugar más que una
enésima ruptura, pero eso sí que sería ya marear la perdiz demasiado. Por eso,
considero que los guionistas deberían centrarse en otros aspectos, y dejar el
tema Penny-Leonard simplemente de fondo, en un muy segundo plano, y que las respectivas
tramas de cada uno vayan por distintos lados.
Esta semana, al caer el episodio en la fiesta americana de Halloween, tenemos parón, así que tendremos que esperar hasta la siguiente semana para nuestra ración de Big Bang Theory. Una pena, porque los episodios de Halloween suelen ser bastante divertidos.
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